Ella

Pues añoro su presencia, el simple hecho de que estuviera en la sala cuando yo entraba; de amanecer a su lado; de verla jugar, reírse. Aunque a veces no tuviéramos mucho tiempo, saber que estaría si la necesitaba tenía algo especial para mí. Y siempre estaba ahí.
Llevábamos suficiente tiempo juntos para haber superado esas fases por las que atraviesa una relación, las buenas, las regulares e incluso las malas, y nos habíamos acomodado a algo que funcionaba para los dos. Nos pasábamos horas hablando de todo, o de nada; en realidad eso daba igual.
¿Lo hemos conseguido?. No. Aunque nunca me arrepiento de nada. Nunca.
4 comentarios
JULIANA -
Ella -
angie.. -
Marcel -
Pero si no era un juego tio y los dos se "quieren" buscala o habla con ella hombre asi de facil tio.